BSH extiende el uso de fundas protectoras

Las cubiertas se utilizan siempre que sea necesario desembalar los aparatos para llevarlos hasta el lugar donde se instalarán, para proteger los electrodomésticos que salen ya desembalados desde las exposiciones y para evitar desperfectos accidentales en la cadena inversa durante su estancia en camiones, almacenes, etc. De esta manera, se evitan daños de transporte que conllevan gastos innecesarios a la cadena de suministro, disminuyen la calidad del servicio y suponen un alto coste medioambiental, sobre todo en aquellos casos en los que los desperfectos obligan a convertir en chatarra el aparato.

La compañía se comprometió ante el comité logístico de la Asociación Nacional de Fabricantes de Electrodomésticos (ANFEL) a dotar a sus servicios técnicos de estas fundas después de comprobar los buenos resultados obtenidos por una parte de la distribución que ya las utilizaba. ANFEL comprobó en 2007 que el impacto de las devoluciones con daños fue de un 2,63% sobre las ventas. Traducido en cifras, se estima que de los 9,66 millones de aparatos vendidos se devolvieron 254.000 unidades, cuyo impacto económico supuso 50,8 millones de euros.

En BSH se han repartido juegos de dos fundas approCover, una se emplea para aparatos de lavado y lavavajillas y dos en los frigoríficos combinados. El reparto a las delegaciones de Interservice se ha realizado en función de su uso y ventas para que así talleres y tiendas dispongan de estas cubiertas siempre que sea necesario.